Lo logré.
Desde pequeña imagine este día, desde que la vi fijamente y note que con tan solo una sonrisa le brillaban los ojos. Y poco a poco mientras iba creciendo, con actuaciones de kínder, exposiciones, concursos me convertí en su orgullo.
Y una de mis metas personales se cumplió.
INGRESE. Aun no a la universidad que quería, ni tampoco a la carrera porque aun no se cual definirá mi futuro.
Pero lo hice y por admisión, y pude sentir esa satisfacción de escuchar sus palabras, que cristalizaban mis ojos de alegría; porque pude hacerla feliz una vez más.
“Gracias Dios por darme una nieta que cada día me alegra más el corazón.”
Te extraño.
1 comentario:
Katy Jacinto te Admiro! amo tu manera de escribir y ojala mejore un poco al llegar a quinto C:
Publicar un comentario